Blanes es inspiración,
es calma, es desconexión, es descubrir.
Tenemos un clima excepcional y unas calas únicas, pero somos mucho más que sol y playa. Somos espíritu mediterráneo y auténtico, reflejo de una ciudad activa y dinámica.
La oferta turística de esta villa histórica y marinera es imprescindible, y la resumimos en este decálogo que todos nuestros visitantes deben tener presente:
Dónde empieza
la Costa Brava
Hay muchas teorías, pero lo cierto es que Ferran Agulló se inspiró en Blanes cuando creó el concepto que da nombre a este territorio. Desde la roca de Sa Palomera, donde comienza la Costa Brava, el paisaje infinito que se abre ante nuestros ojos nos emociona. Disfrutad del momento.
Playas
sin fin
Playas y calas con bandera azul, aguas transparentes y arena blanca. Cuatro kilómetros de costa para disfrutarla cómo cada cual quiera. Para hacer de todo o solo para estar relajadamente. Para ir solo o en familia, con amigos o con conocidos, buscando energía o calma, actividades o tranquilidad. Playas que enamoran.
Más de mil
años de historia
La huella de los Vizcondes de Cabrera en Blanes es todavía visible. Fueron años de privilegios y guerras, en que dominar el mar suponía influencias y riquezas. La historia de Blanes nos permite hacer un viaje en el tiempo y descubrir también los antepasados ilustres que contribuyeron a dibujar la historia del nuevo mundo y de la ciudad de hoy.
Villa mediterránea
y marinera
El mar ha configurado la vida y la historia de Blanes. Hoy en día, su puerto combina la dedicación pesquera con la deportiva, y su dársena, con capacidad para más de 300 amarraderos, ofrece todos los servicios necesarios para la práctica náutica. Mientras, en la lonja, como siempre, se siguen celebrando subastas de pescado todas las tardes. El castillo de Sant Joan guía a los patrones hacia buen puerto.
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Villa romántica y florida
Un jardín histórico de gran belleza, y otro jardín tropical, invitan a la calma y a descubrir espacios tranquilos y elegantes. Marimurtra es un jardín naturalista romántico, un Bien Cultural de Interés Nacional que mantiene el espíritu novecentista y que forma parte de la Comunidad Internacional de Jardines Botánicos. Pinya de Rosa es una de las bibliotecas de cactus vivas más interesantes de Europa, con más de 7.000 especies de todo el mundo.
Inspiración
de artistas
Ruyra, Alemany, Maragall o Bolaño, son algunos de los apellidos de poetas y escritores que encontraron en Blanes una inspiración, y de los cuales tenemos referencias en itinerarios, rutas o patrimonio de la villa. Algunos de ellos veraneantes ilustres y otros blandenses, la ciudad ha sido un lugar de acogimiento y creación a lo largo de los siglos.
Ciudad de fuegos y fiestas
Blanes es mediterránea y alegre, una ciudad con una agenda festiva y de eventos repleta durante todo el año, que tiene su momento álgido en julio, cuando se celebra el Concurso Internacional de Fuegos Artificiales de la Costa Brava, un festival de luz, color y humo con más de cien años de historia. ¡Pero la actividad no para! Fiestas populares y tradicionales, fiestas de barrio, eventos culturales, gastronómicos, musicales y deportivos, que hacen de Blanes una ciudad dinámica y siempre animada. ¿Te apuntas?
Ciutat
esportiva,
espacio singular
Con una ubicación estratégica y 40.000 m2 de superficie, la Ciutat Esportiva de Blanes es un espacio único en la Costa Brava, que dispone de espacios versátiles para diseñar y promover todo tipo de eventos: deportivos, musicales, sociales o de empresa, ferias y exposiciones…. posibilidades infinitas y servicios de primer nivel.
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Productos de la tierra
y del mar
Cada día los pescadores de Blanes nos ofrecen el regalo del mar. Cada día, los payeses de La Tordera nos traen frutos de la tierra. Así es fácil poder ofrecer lo mejor de ambos mundos y estimular la creatividad de los comercios y restaurantes. Verduras y frutas, dulces de autor, pescado y marisco fresquísimo, vinos, cavas y cervezas artesanas… ¡Un mercado abierto todo el año!
Ciudad turística, comercial y de servicios
Blanes es una ciudad activa, que cuenta con las equipaciones y los servicios propios de una destinación turística de primera orden. Hoteles, campings y apartamentos que configuran una oferta de alojamientos de calidad. Restaurantes, comercios y otros servicios para las personas, y que hacen de Blanes la principal villa de servicios de la Selva, así como una de las principales de la Costa Brava.